“imaginando
en su ánimo cosas que nunca se habían de
cumplir”
Homero.-“
Iliada”.II,34
Hay algo más profundo que un
simple animo estimulante en la sentencia
que nos dice que comencemos algo , que ya es mucho.
“ dimidium facti, qui coepit”
“ el
que comienza tiene hecha la mitad del
camino (1)
Es en ese mismo verso de
Horacio donde se encuentra, a continuación, el famoso
“ sapere aude”
¡
atrevete a saber!”(1),
seguido del estimulante.
“
incipe!”· (2)
“!
Comienza!
La exhortación de comenzar
algo nos dice mas bien, que mientras no
se actúa, no se es. Nos habla de que quedarse
en lo que se es, en los humanos, es no ser nada. Los hombres no somos esencia sino acto y
potencia y somos lo que hacemos de nosotros mismos.
“ No
poseen naturaleza, es una extraña mezcla de ser y no ser “ (3)
Es por este motivo de que no
somos nada antes de comenzar a hacernos por lo que los niños pueden considerarse y
tratarse como puramente “ naturales” hasta que llegan a otra etapa de su vida
que es la pubertad y dejan de serlo. Llegado a es termino, el niño se convierte
en adulto. Comienza aquí su vida propiamente humana, es decir desprendida de la
biología , encarnada en la dependencia
de la madre, despegándose ya de la materialidad “ natural”, de únicamente crecer y
alimentarse .Pasa a ser adulto y por lo tanto ser , no natural sino social y
cultural. La introducción en el mundo humano y social se escenifica en todas
las civilizaciones como una ruptura dolorosa en los ritos de iniciación a la
edad adulta. Llega el momento de su admisión entre los hombres y eso pasa forzosamente
por el dolor y la muerte del ser natural
. Se trata de una nueva
generación, una regeneración, el comienzo de una forma de vida considerada superior: la humana. El
dolor del paso ilustra que la cultura y
adquirir la humanidad y la racionalidad adulta
son algo contra la naturaleza.
Los seres humanos no están
bioprogramados y entonces el humano es un ser como se quiere y como él mismo quiera. Con otras
palabras, es un animal que culturalmente
se domestica a si mismo.
Al no estar dado el hombre
no es sino lo que hace y se hace.
“La identidad del hombre no se define por lo que es sino por lo que
hace” (4)
El hombre no está completo
sino que ha de hacerse y él mismo consiste en sus posibilidades .Está
constituido mas por sus expectativas que
por los hechos. De manera inagotable, nunca
es todo lo que puede ser. Anoto, de paso, para que no haya
confusiones, que la dirección hacia el futuro es una facultad racional no del
deseo. El deseo cede ante la razón en esa proyección de lo posible y lo posible no es una simple pulsión sino una
deliberación, una actitud de juicio deliberante. De ahí su necesaria
vinculación con lo social, el lugar de deliberación y juicio y con lo cultural,
el lugar más humano, donde el humano se
hace , por así decir, contra natura
El inicio , el comienzo de
cualquier hacer previamente deliberado es al mismo tiempo el comienzo de hacerse uno mismo. El
comenzar, es el inicio de ser .Solo devenimos humanos cuando nos hacemos y nos
hacemos con la razón, la facultad que se
adentra en el terreno de lo que será
posible y aun no es. De ahí que
“ Porta itinere longuísima”
“La
puerta es la parte más larga del viaje (5)
Al mismo tiempo solo
devenimos humanos cuando nos hacemos
miembros de la comunidad. La cultura y la sociedad nos da esa condición y nos permite el desprendimiento
de la naturalidad biológica.
“Solo devenimos
humanos cuando nos hacemos ciudadanos”
(6)
Lo social , lo racional y su
ejercicio para el futuro y lo
posible son categorías de lo humano.
Por el contrario la vista
del pasado de lo que es y ha sido, inamovible
y convertido en necesario sin opción, la constatación de la certeza, es únicamente
el entendimiento de la verdad y ejercicio de la facultad de la memoria por
excelencia.
Parece como si se dieran estas
ecuaciones agrupando las diferentes categorías conceptuales en juego.
a) Futuro-social-racional-
facultad de la razón –posibilidad- deliberación
b) Pasado-individual-facultad
de memoria- realizado- certeza
¿Dónde se
situaría la verdad en estos esquemas? ¿ En a o en b?
Estamos acostumbrados a
identificar la verdad como la adaptación
de neustra entendimiento a las cosas que son pero ese entendimiento está mas en
la memoria, en el conocimiento del
pasado y de lo estable,en lo inmutable que ya no puede casmbiarse. A este inmutable
e inmodificable lo llaman los griegos aletheia y se oponía, en
Parmenides, en Platon y los platonistas, a la doxa, la opinión. Esa aletheia
, verdad absoluta de Parménides, tiene la misma raiz que la “lethe”,
el olvido. A-aletheia seria el
equivalente a lo que no se olvida, o que permanece del pasado en la memoria. La
laguna Lethe era aquella en que los
que se sumergían perdían toda memoria. La
a-namnesis de Platon , el
recuerdo , se refiere a recuerdos de Ideas
previas al conocimiento posterior
sensible , que existen en otro mundo astral pero al que ha pertenecido la mente
humana y que recuerdan. Son, en otro d elos relartos míticos de Platón, cosas
verdaderas que están fuera de la caverna
donde todos habitamos sin darnos cuenta que lo que vemos no son sino sombras,
reflejos del exterior. La doxa, por el contrario se relacionaba con la libertad de palabra, que depende de la libertad y las opciones referidas
a lo que puede hacerse y debe de
hacerse, a lo posible que no está aún dado y que no existe en ningun sitio.
Para Platon esa doxa era engañosa, la
realidad no esta en ella sino afuera de nuestra disposición libre. En efecto,
doxa, esta relacionada con libertad y esta misma libertad es , a su vez, empujar
un paso más allá el limite de lo posible. Por eso el conocer el futuro,
pretender la verdad, una aletheia de
certeza en el futuro y no solamente en el pasado, no es un facultad de la razón, sino una
aberración que sería inhumana propia de excepcionales privilegiados
porque en el tereno de lo que haya de venir y ser, es la doxa, la libertad y las
razones deliberadas y compartidas las
que actúan no la razón como visión de
una alethneia inmutable. El mundo de las Ideas, de la Verdad. La
racionalidad, con esto, consiste en el razonamiento discursivo entre todos y no la contemplación de uno. El don de la profecía es, o bien un castigo
con el peso adherido de ser rechazado
siempre, o bien una facultad solamente atribuible
a los dioses, que no usan la razón sino su omnipotente sapiencia y visión.
“Cui
mali nihil est nec ese potest, quid hunc opus est dilectu bonorum et malorum,
quid autem ratione, quid intelligentia quibus utimur ad eam rem, ut apertis obscura adsequamur,
at obscurumk deo nihil potest esse.”
“ un
ser que no experimenta nada malo ¿ qué necesidad tiene de escoger entre las
cosas buenas y las cosas malas?.¿O qué necesidad tiene de la razón o de la
inteligencia. Estas facultades las utilizamos para alcanzar las cosas oscuras
partiendo de las que nos son conocidas, ahora bien para un dios nada puede ser
oscuro” (7)
Desde ahí, puede decirse que el tiempo pasado soy yo, solo y
solitario, sin doxa alguna sino enfrentado a la aletheia, y el tiempo futuro son los otros. Ese tiempo futuro es también
el espacio, el sitio donde me desarrollo , forzosamente entre otros, con
referencia a ellos. No hay proyecto individual por cuanto no hay ningún “puede ser”, que siendo de razón, no
sea doxa, opiniones en
deliberación, razones compartidas.
Solo el pasado, irremisible e inmutable, sin sometimiento a doxa alguna , sino pura Verdad , a-letheia, an-amnesis, objeto de
memoria, es individual. Lo objeto de razonamiento y deliberación es colectivo.
En resumen: pasado, memoria,
soledad, individualidad, son las categorías de la verdad y futuro, razón, libertad
y espacio categorías de la opinión. Esta opinon reivindica no obstante la
verdad pero no como una necesidad irrebasable e independiente de nosotros mismos.
Esa pretensión de irresistibilidad la tiene cando se refiere a la administración
y gestión de las cosas no a las conductas de los hombres En ese reino de lo humano, la verdad es una criatura
del pensamiento que discurre dialécticamente, entre muchos.
“Es
la verdad, por lo tanto, que no puede ser obtenida sino
en el contraste y cooperación de lo sujetos en la réplica e interrogación
reciprocas”(8)
Su cualidad de verdad lo
adquiere por el cumplimiento del acuerdo deliberado e igual derivado de esa
cooperación. ¡Pero es una unanimidad tan inestable!
Al hablar de comenzar, me viene
en seguida a la mente el concepto de natalidad que produjo Hannah Arendt La libertad, para Arendt es la capacidad de comenzar algo nuevo. Ese algo nuevo se hace mediante la acción de manera que ser libre es actuar. No se es libre antes, como condición, ni después, como beneficio de una situación sino que ser libre y actuar es lo mismo. Ese actuar libre, no obstante solo se hace en la esfera publica. Solo a través de la creación de espacios públicos de deliberación es donde se puede ser libre. El comienzo, la natalidad es la irrupción de lo inesperado. Es la acción humana que no está bioprogramada Con cada nacimiento humano se abre la posibilidad de actuar y quebrar lo dado. Esa natalidad se da consecuentemente en el momento de la irrupción del individuo en la espera publica. La vida que se desarrolla a través de la esfera política, la vida del ciudadano es para Arendt la vida verdadera. Esa acción se acompaña de la aparicion con la palabra y el discurso en la esfera de lo público. Resucita asi aquel vivere civile como ideal superior de los republicanos italianos del renacimiento como la única vida digna por ser la única con moralidad. En esa labor de comenzar juega un papel central la imaginación como aquella facultad del espiritu que sabe inventar situaciones que no son y cosas que no existen, y la mas importante, la de juzgar y deliberar en tanto que acto de colocarse en lugar de otro en una perspectiva “ ampliada” que supera la individualidad. De ahí que su libertad es siempre un vivere civile público y siempre es una moralidad por cuanto siempre necesita su aparición en las relaci0ones con otros.
Este concepto de comenzar
como un ejercicio de libertad que quiebra e instituye una condición
y lugar público nuevos, construye la sociedad nuevamente, tiene
semejanzas con el concepto de Cornelius Castoriadis de “instituir”. El ser social, para él, igual
que para Arendt , es actividad y es hacer. El ser humano es actividad pero es
actividad que crea, es un hacer que inventa, es un hacer que genera a
diferencia de cualquier otro ser vivo. Genera e inventa el mundo que habita, imagina,
despliega, genera algo allí donde no había, trasforma el entorno y en este acto
se transforma a sí mismo y ejerce su
libertad. El cambio social implica discontinuidades radicales que
no pueden ser explicadas en término de causas deterministas o presentadas como
una secuencia de acontecimientos. La imaginación es la facultad que contribuye
a este despliegue de la libertad. Como
en Arendt, libertad está emparentada con la acción y realización de algo nuevo
no existente antes, con el comenzar y se despliega construyendo imaginarios de
relaciones, imaginarios sociales.
Desde este punto de vista,
el nivel de existencia del ser humano empieza por lo imaginario. En ambos
casos, el comenzar es lo propio, especifico y exclusivo de lo humano. De ahí la satisfacción de desligarse en el comenzar.
Todo ello explica el porqué
de nuestro gusto por los comienzos,
“ut est mos hominum paruula initia
pertinaci studio prosequendi”
“Como es propio de la costumbres humanas
desarrollar con ardor y entusiasmo las
cosas mas humildes en sus comienzos (9)
Por esta puerta, como si de
un agujero de oportunidad para mayores beneficios y ganancias se
tratase se han introducido los grandes poderes económicos con el fin de transformar
el hombre en un homo economicus, queriendo cambiar su vida y su ética misma
para transformarle en empresario de si mismo, haciendo que su “realización”
consista en estar al servicio de una sociedad dominada por el inertes lucrativo de enriquecimiento y que necesita
de servidores y consumidores aplicados no solo en su tiempo de trabajo y compra
sino en toda su vida biológica , social,
moral y espiritual. . Servidores que crean que se enriquecen personalmente en
una supuesta y elogiada creatividad imaginativa
al hacerse empleados modelos al servicio del fin patronal cuando están siguiendo obedientemente las
normas dictadas por los que proponen una sociedad de lucro cuando no simplemente
para obtener la adhesión del subordinado empleado para que no reclame y trabaje mucho , en peores condiciones ,
pero más contento. Se les domestica a todos para que gestionen su vida personal en el lema de trabajar más
para ganar más como si uno mismo fuese un equipamiento o un recurso, un capital
a invertir en una actividad de empresa
explotadora de uno mismo. Se genera la ilusión de creatividad
y libertad en las opciones que da el consumo o por las facultades propias puestas al servicio
del interés ajeno.
Hay un uso particularmente
perverso y desviado para denominare
el comenzar a hacer una cosa que exija
esfuerzo como es el significado que se le da al termino emprender. Comenzar se ha trasformado en emprender. A su
vez ese emprender , comenzar con empeño y esfuerzo, se ha convertido en el
lenguaje usual, en comenzar un negocio. De la manera más prosaica y reductora, la categoría moral y espiritual que significa el comienzo
se ha hecho simplemente una actividad mercantil.
La figura del emprendedor se
está presentando como una renovación institucional del mundo
empresarial y del capitalismo. Estas metamorfosis destinadas no solo a crear una psicología del empleado sino orientadas a fabricar la propia conducta y
forma de vidas de las gentes, no son nuevas.
El empeño político de modificar el alma y el cuerpo del ser humano para que su
vida sea a medida del poder dominante es
lo que Foucault llama la biopolítica. No basta con explotar y prohibir, hay que
fabricar nuevos seres. De paso, como
esto era discutible y al discurso se veía la mala intención particularmente en
los momentos de crisis, esta figura ha servido siempre para remendar el tejido
moral de la institución empresa deteriorado en esos momentos. A lo largo de los años noventa del siglo XX,
ya el empresario había renovado las viejas facciones del jefe
déspota, del jerárquico patrón fordista. El jefe de antaño ha sabido disfrazarse y jugar a ser líder, mago, artista, deportista de alto
rendimiento, brujo, narrador. Acumulando todo esto este teatro se mostraba una
historia que trataba de dar sentido a lo inexplicable. Que unos dominasen sobre
otros cuando las sociedades se hacían políticamente
más democracias dejaban poco espacio
como reserva de dominación al margen de
la mano publica de todos. Pero en la realidad la función directiva de las empresas
capitalistas ha sabido reformarse para seguir el dominio las mismas manos. La lógica de autoridad que
deriva de dicha función continúa
funcionando llamándose
creatividad a quien aporta mayor
imaginacio0n en la obediencia.
El término emprendedor evita el paisaje social y moral del domiante-dominado al querer describir un exitoso creador, un arriesgado aventurero
que siempre emprende, inicia, caminos nuevos, con un heroico riesgo. Asió el empresari
ya no es un explotador sino un explorador. No importa saber que estos nuevos emprendedores son hijos de
padres que ya están en consejos de administración de seguros negocios o bien muy lejos de las aguas procelosas de los riesgos, pues
cuando caen y les alcanza la mala fortuna, no es que vuelvan a empezar, sino
que caen sobre colchón de plumas de medios materiales que siempre tiene escondidos
y que parecen inagotables. La historia
de los multimillonarios que han quebrado por inepcia es tan larga como la de los
que se han recuperado y vuelto a cometer
las mismas inepcias, siempre multimillonarios, pero dejando de lado las víctimas de su juego de creatividad. Así
es la actividad de los más notables, como por ejemplo, el recorrido empresarial
de Donal Trump, de un fracaso
tras fracaso y quiebra tras quiebra en empeños sucesivamente entre fraudulentos y disparatados sin mientes en quienes
deja en el camino en sus empresas liquidadas y sus aventuras fallidas. Este emprendedor
nunca duerme al raso pase lo que pase y se ocupe de lo que haya de ocup0arse en
una imaginación emprendedora y creativa que siempe puede permitir ser dado que siempre puede abrigarse, alojarse y
alimentarse a saciedad.
Pero la historia de estos
emprendedores, antes empresarios, antes patrones, es siempre la misma. Vivir
del trabajo de los demás y de las
espaldas curvadas de los pobres.
Es la perversión peor
la de utilizar el arma de las facultades
mas humanas de las que hablaron Horacio,
Cicerón, Rousseau, Cassirer, Arendt,… tanta gente sabia para orientar y cambiar
torcidamente al hombre de manera que hasta su alma misma esté al
servicio del poderoso y que todo rendimiento de facultades humanas sea rendimiento para beneficio lucrativo.
Una prueba más de que nos estamos convirtiendo
en monstruos y no lo notamos. En lugar de sujetos libres, autónomos, es decir
que nos determinamos a mostros mismos, nos están convirtiendo en una maquina deseante
de consumo de cosas. El gozo que implica el comenzar por el camino de hacernos a nosotros mismos
de ,manera libre y autónoma se está
transformando en el gozo de consumir algo nuevo que nos es dado como
pienso para apacentarnos.
Al contemplar estas cosas me
voy volviendo cada vez más pesimista
sobre nuestro futuro. El ser humano tiene una verdadera pulsión a desconocerse- Kant- y hay tantas condiciones
de la vida humana que obstaculizan la vida moral que no sabe uno si realmente
el ser humano está hecho para realizar algún bien o ni siquiera para no ser
perjudicial para el resto de las vidas.
(2) .Ibid. I,2,41
(3).E.Cassirer “Antropología
Filosófica. Fce pag 30
(4).E.Casirer.-“filosofía
de las formas simbólicas” FCE 1971 I,31
(5).Varron.-Res Rustica I,2,2
(6).Rousseau.-Contrato
Social
(7).-Cicerón de Natura
Deorum.- XV, 38
(8) E. Cassirer .-
Antropología filosófica. FCE p 21
(9)Valerio Maximo .-Hechos
y dichos de los hombres ilustres .- Lib Cap 4 2.4.4.
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